La historia del Domaine Ogier comienza, como tantas otras del Ródano Norte, como una granja agrícola en la que la fruta tenía bastante más relevancia que la parte vinícola. De hecho, el abuelo de Stéphane Ogier ni siquiera elaboraba vino, sino que se dedicaba al negocio frutal. Melocotones y albaricoques parece que se dan bien en Cote-Rotie.
Es el padre de Stephane (Michel) quien, a principios de los años setenta, comienza las andaduras vinícolas. Por aquel entonces, apenas tenían las viñas Cote Rozier y una parcelita de Lancement que provenía de su mujer Hélene. En 1987, Michel y Hélène ya embotellaban toda la producción mientras un joven Stéphane, diez añitos, correteaba por las viñas, la bodega para hacer fondo físico en su gran pasión: el rugby.
Stéphane estudió en Beaune cinco años y allí aprendió el gusto por la finura y la elegancia. Marchó luego a Sudáfrica donde realizó dos vendimias para, en 2004, reincorporarse a la bodega y ponerla patas arriba. Si los vinos de Michel eran de gran finura, Stéphane quería sacar todo lo que la Syrah y la Viognier pueden dar de sí en un terruño tan sensacional como el de Côte-Rotie. Más intensidad, fermentaciones más largas, pigeages para tener más de todo y un rejuvenecimiento del parque de barricas.
Los vinos de Stéphane rápidamente captaron la atención del gran experto en vinos del Ródano: Robert Parker. De ahí, al estrellato. Con el éxito comercial, la posibilidad de acceder a más y mejores parcelas en las mejores zonas de Côte-Rotie pero sin perder de vista la necesidad de buscar terruños interesantes en Vin de Pays, con precios más aquilatados y una excelente relación calidad precio.
En la última década, una nueva bodega ultramoderna, todo pensado para poder trabajar de la mejor forma posible, incluido un revolucionario sistema de humidificación en la sala de barricas. Todo pensado para dejar criar los vinos más tiempos y no sólo buscar sino encontrar esa finura y elegancia que es lo que Stéphane Ogier busca en todos sus vinos.
Vinos Importados por Coalla/Import
Stéphane Ogier Syrah d’Ogier
Stéphane Ogier elabora el Syrah d’Ogier a partir de 5 hectáreas de viñedo situadas en el Plateau de Louze. Allí hay Syrah plantada hace más de 20 años sobre esos suelos silíceos que en la zona llaman Galets Roulés. Selección de uva en viñedo y en entrada de bodega, despalillado y maceración en frío seguida de fermentación con levaduras indígenas. Crianza de 12 meses en barrica siempre usada. Es fresco, frutal, con ese nervio del suelo. Para disfrutar en los próximos cinco años.
Stéphane Ogier Blanc d’Ogier
En pequeñas fincas situadas en Tupin-Semons, Ampuis y Malleval, con suelos graníticos, se cultivan la Viognier, la Marsanne y la Roussanne que dan lugar a este vino blanco básico de Stéphane Ogier siguiendo las prácticas de excelencia en las que ha construido su reputación: vendimia manual, selección en viñedo y mesa de selección en entrada de bodega, fermentación con levaduras indígenas y una crianza de 10 meses en barricas usadas y depósito en contacto con las lías finas. Un vino que mantiene la frescura y que nos parece especialmente versátil.
Stéphane Ogier Le Temps est Venu
Procedente de Plan de Dieu y Visan, este pequeño gran Cotes du Rhone de Stéphane Ogier se elabora con la meticulosidad habitual en Stéphane. Mayoritariamente Garnacha y Syrah, con mínimas proporciones de Mourvedre y Cinsault. Un vino en la sapidez, en la alegría de beber. No será el Ogier más complejo pero sin duda animará nuestras copas y nuestras mesas. Un Ródano impecable.
Stéphane Ogier Syrah La Rosine
En la ladera de Tupin-Semons Stéphane tiene plantada Syrah con una alta densidad. Es un suelo granítico, ideal para la variedad. La vendimia es manual como en todos los vinos del Domaine y se selecciona doblemente. Un pequeño porcentaje de la cosecha conserva el raspón y la fermentación arranca de forma natural con levaduras indígenas. La crianza de 12 meses en roble francés usado termina de afinar el vino y nos permite disfrutarlo durante los próximos 10 años.
Stéphane Ogier Viognier de Rosine
El Viognier de Rosine se elabora a partir de una finca de 3 hectáreas situada en Tupin-Semons. Es una finca de fuerte componente granítica, plantada íntegramente con Viognier hace más de 20 años. La densidad de plantación alta, de más de 10.000 pies por hectárea y el suelo granítico es responsable de la frescura de este vino cuyo rendimiento es pequeño, apenas 30hl/ha. Fermenta en barrica y fudre con levadura indígena, donde continua la crianza durante 8 meses.
Stéphane Ogier Saint Joseph Le Passage Rouge
El viñedo del Saint-Joseph Le Passage está situado en Malleval. Es un suelo granítico ideal para la Syrah que, aquí, fue plantada hace más de 30 años con una alta densidad (10.000 pies/ha). Rendimientos de Grand Cru borgoñón, selección de fruta, despalillado y maceración en frío para retener la fruta. Fermentación con levadura indígena y 18 meses de barrica fundamentalmente usada. Un Saint-Joseph que nos muestra la Syrah sobre granito y el savoir-faire de Stéphane Ogier.
Stéphane Ogier Condrieu La Combe de Malleval
De dos viñedos llamados La Combe y Veauvignière (situado en Malleval) se elabora este Condrie La Combe de Malleval. Granito en el suelo plantado con Viognier, selección de fruta y fermentación en toneles grandes con levaduras indígenas. Los rendimientos son mínimos, apenas 35hl/ha, y el vino retiene una frescura y una mineralidad que le dan toda la distinción. 8 meses de crianza en barrica y potencial de envejecimiento.
Stéphane Ogier Côte-Rotie Mon Village
Sobre suelos de granito y micaesquistos situados en las dos zonas de Cote-Rotie (Cote Brune y Cote Blonde), la Syrah está en su hábitat natural. Nació para brillar justo aquí. Vendimia manual con selección de uva en viña y bodega. 20% de raspon, maceración en frío y fermentación con levadura indígena, seguida de 18 meses en barrica francesa, un 20% de la cual es nueva. Se trata del Cote-Rotie que representa a Stéphane Ogier. El de “su pueblo”, el que combina la finura de la Cote Blonde y la potencia de la Cote Brune. Envejece magníficamente durante diez o quince años.
Stéphane Ogier Côte-Rotie Résérve
De una selección de 11 lieux-dits de Cote-Rotie, Stéphane Ogier realiza su reserva personal. Viñas de más de 40 años, dos tercios sobre la Cote Brune y sus suelos de micaesquistos y un tercio sobre la Cote Blonde y sus suelos de granito y gneiss. Siempre con exposición Sur-Sureste y fuertes pendientes de hasta el 60%. 30% de raspón, fermentación con levadura indígena y ciranza de 20 meses en barrica, sólo un 20% de la cual es nueva. Un vino que luego se afina durante al menos 2 años en botella en la propia bodega. Y con un potencial de envejecimiento de más de 20 años
Stéphane Ogier Côte-Rotie Lancement
En la Cote Blonde, sobre suelos de gneiss, Stéphane Ogier elabora este Cote-Rotie de finca, en Lancement. Es una finca plantada en 1977 con muy alta densidad. La vendimia es manual, se mantiene el raspón en su totalidad, y fermenta en inoxidable, tras lo cual tiene una crianza de 20 meses en barrica de roble francés. Nos encomtramos con uno de los vinos emblema de Stéphane Ogier, de gran intensidad y finura, como corresponde a los mejores terruños de la Cote Blonde.
Stéphane Ogier Côte-Rotie La Belle Hélène
En la Cote Blonde, sobre suelos de esquistos, Stéphane Ogier elabora este Cote-Rotie de finca, en La Belle Hélène. Es una finca de apenas media hectárea con orientación Sur plantada en 1958 con muy alta densidad, 10 000 pies. La vendimia es manual, se mantiene el 50% del raspón, y fermenta en inoxidable, tras lo cual tiene una crianza de 20 meses en barrica de roble francés. A pesar de que los parcelarios de Ogier son todos sensacionales, La Belle Hélène es quizá el famoso. Un vino que necesita unos cuatro o cinco años tras la vendimia.
Stéphane Ogier Sélection de Lieux-Dits
Cada año, Stéphane Ogier prepara una caja surtida con una botella de cada uno de los pagos de Côte-Rotie que en esa añada ha encontrado especialmente interesantes. Fongeant, Cote Bodin, Cognet, Bertholon, Montmain, La Viallière y Le Champon dependiendo de los años.